Llena de matices, su voz surge inesperadamente, se deja ir entre murmullos que casi se vuelven caricias. Ivette Cepeda canta en colores, con el desespero del amarillo, la sutileza del violeta, la pasión de los rojos, la lejanía de los azules y la esperanza del verde. Canta con la candidez del rosa y con la tristeza del gris. Se rompe en marrones cuando cuando sus brazos buscan a quien le escucha, a quien le devuelve en aplausos el arcoiris que ella regala en sus canciones. Ivette Cepeda, una voz de colores.
Barcelona, 4 de febrero 2014, Guillermo Torres
Fotografía: Alejandro Pérez
Una voz de colores y con muchos matices.
ResponderEliminarEn una fortuna ver que sus colores nos pinta el alma y salimos estrenando sonrisa.